martes, 27 de julio de 2010

Bajo un cielo de estrellas



Vals 1941
Música: Enrique Francini / Héctor Stamponi
Letra: José María Contursi

Mucho tiempo después de alejarme,
vuelvo al barrio que un día dejé...
con el ansia de ver por sus calles
mis viejos amigos, el viejo café.
En la noche tranquila y oscura
hasta el aire parece decir:
"No te olvides que siempre fui tuya
y sigo esperando que vuelvas a mí".

En esta noche vuelvo a ser
aquel muchacho soñador
que supo amarte y con sus versos
te brindó sus penas...
Hay una voz que me dice al oído :
"Yo sé que has venido
por ella... por ella !".
Qué amable y qué triste es a la vez
la soledad del arrabal
con sus casitas y los árboles que pintan sombras.
Sentir que todo... que todo la nombra,
¡qué ganas enormes me dan de llorar!

Bajo el cielo cubierto de estrellas
una sombra parezco al pasar...
No he de verme jamás con aquella
¡qué un dia fue mia... y hoy debo olvidar!
En la noche tranquila y oscura
hasta el aire parece decir:
"Para qué recordar que fui tuya
si yo ya no espero que vuelvas a mí!".

sábado, 24 de julio de 2010

Al compas de corazón



Tango 1942
Música: Domingo Federico
Letra: Homero Expósito
Late un corazón,
déjalo latir...
Miente mi soñar,
déjame mentir...
Late un corazón
porque he de verte
nuevamente,
miente mi soñar
porque regresas lentamente.

Late un corazón...
me parece verte regresar con el adiós.
Y al volver gritarás tu horror,
el ayer, el dolor, la nostalgia,
pero al fin bajarás la voz
y atarás tu ansiedad de distancias.
Y sabrás por qué late un corazón
al decir... ¡Qué feliz!...
Y un compás, y un compás de amor
unirá para siempre el adiós.

Ya verás, amor,
qué feliz serás...
¿Oyes el compás?
Es el corazón.
Ya verás qué dulces
son las horas del regreso,
ya verás qué dulces los reproches y los besos.
Ya verás, amor,
qué felices horas al compás del corazón.



Mumuki



Lluvia
Raúl Gonzalez Tuñon
A Amparo Mom

Entonces comprendimos que la lluvia también era hermosa.
Unas veces cae mansamente y uno piensa en los cementerios abandonados.
Otras veces cae con furia y uno piensa en los maremotos que se han tragado tantas espléndidas islas de extraños nombres.
De cualquier manera la lluvia es saludable y triste.
Sus tambores acunan nuestras noches y la lectura corre a su lado por los canales del sueño.
Tú venías hacia mí y los otros seres pasaban.
No habían despertado todavía al amor, no sabían nada de nosotros.
De nuestro gran secreto.
Ignoraban la intimidad de nuestros abrazos voluptuosos, la ternura de nuestra fatiga.
Acaso los rostros amigos, las fotografías, los paisajes que hemos visto juntos, tantos gestos que hemos entrevisto o sospechado, los ademanes y las palabras de ellos. Todo, todo ha desaparecido y estamos solos bajo la lluvia, solos en nuestro compartido, en nuestro apretado destino, en nuestra posible muerte única, en nuestra posible resurrección.
Te quiero con toda la ternura de la lluvia.
Te quiero con toda la violencia de la lluvia.
Te quiero con todos los tambores de la lluvia.
Te quiero con todos los violines de la lluvia.
Aún tenemos fuerzas para subir la callejuela empinada. Recién estamos descubriendo los puentes y las casas, las ventanas y las luces, los barcos y los horizontes.
Tú estás arriba, suntuosa y bíblica, pero tan humana; increíble, pero tan real; numerosa, pero tan mía.
Yo te veo hasta en la sombra imprecisa del sueño.
Oh, visitante.
Ya es seguro que ningún desvío nos separará.
Iguales luces señaleras nos atraen hacia la compartida vida, hacia el destino único.
Ni en nuestra carne ni en nuestro espíritu nunca pasaremos la línea del otoño.
Porque la intensidad de nuestro amor es tan grande, tan poderosa, que no nos daremos cuenta cuando todo haya muerto, cuando tú y yo seamos dos sombras y todavía estemos pegados, juntos, subiendo siempre la callejuela sin fin de una pasión irremediable.
Oh, visitante.
Estoy lleno de tu vida y de tu muerte.
Estoy tocado de tu destino.
Al extremo de que nada te pertenece sino yo.
Al extremo de que nada me pertenece sino tú.
Sin embargo yo quería hablar de la lluvia, igual, pero distinta, ya al caer sobre los jardines, ya al deslizarse por los muros, ya al reflejar sobre el asfalto las súbitas, las fugitivas luces rojas de los automóviles, ya al inundar los barrios de nuestra solidaridad y de nuestra congoja, los humildes barrios de los trabajadores.
La lluvia es bella y triste y acaso nuestro amor sea bello y triste, y acaso esa tristeza sea una manera sutil de la alegría. Intima, recóndita alegría.
Estoy tocado de tu destino.
Oh, lluvia. Oh, generosa.

sábado, 17 de julio de 2010

La novia ausente



Tango 1933
Música: Guillermo Barbieri
Letra: Enrique Cadícamo
A veces repaso mis horas aquellas
cuando era estudiante y tú eras la amada
que con tus sonrisas repartías estrellas
a todos los mozos de aquella barriada.
¡Ah! las noches tibias... ¡Ah! la fantasía
de nuestra veintena de abriles felices,
cuando solamente tu risa se oía
y yo no tenía mis cabellos grises.

Íbamos del brazo
y tú suspirabas
porque muy cerquita
te decía: "Mi bien...
¿ves como la luna
se enreda en los pinos
y su luz de plata
te besa en la sien?"
Al raro conjuro
de noche y reseda
temblaban las hojas
del parque, también,
y tú me pedías
que te recitara
esta "Sonatina"
que soñó Rubén:
(Recitado:)
"¡La princesa está triste! ¿Qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa.
Que ha perdido la risa, que ha perdido el color...
La princesa está pálida en su silla de oro,
está mudo el teclado de su clave sonoro
y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor."

¿Qué duendes lograron lo que ya no existe?
¿Qué mano huesuda fue hilando mis males?
¿Y qué pena altiva hoy me ha hecho tan triste,
triste como el eco de las catedrales?
¡Ah!... ya sé, ya sé... Fue la novia ausente,
aquella que cuando estudiante, me amaba.
Que al morir, un beso le dejé en la frente
porque estaba fría, porque me dejaba.

lunes, 12 de julio de 2010

Empinao



Musica-Letra: Baffa-Berlingieri

Borras con tres vasos de tinto tu pena
uis de las luces que quieren erir
y undis a tu sombra que ya tienen sombras
en la semisombra de un bar todo gris.
sabes la poesia que vaten las cosa
del chamuyo errante junto al mostrador
de las mil macanas de la madrugada
del abrazo bueno que el vino te dio
Empinao
de noche y misterio, de humo y de alcohol,
descubris la cancion escondida
en las viejas mesas del gris bodegón.
Empinao
pa tu bulin reo silbando te vas
veredas vacias, una calle sola
ventanas dormidas que esperan el sol.
un cacho de nada te da la belleza
un color sin tiempo te quiere tocar
y en cualquier esquina te dice algun verso
la cruel fantasia que quiere volar.
Relumbron de fasos de algún bar abierto
de nuevo la cheno te quiere atrapar
embalurdamiento del vivir sin vento
un vaso de tinto dira la verdad.
Empinao
de noche y misterio, de humo y alcohol,
descubris la cancion escondida
en las viejas mesas del gris bodegón.
Empinao
pa tu bulin reo,silbando te vas,
veredas vacias, una calle sola
ventanas dormidas que esperan el sol.

domingo, 11 de julio de 2010

Siempre se vuelve a Buenos Aires



Música: Astor Piazzolla
Letra: Eladia Blázquez

Esta ciudad está embrujada, sin saber...
por el hechizo cautivante de volver.
No sé si para bien, no sé si para mal,
volver tiene la magia de un ritual.
Yo soy de aquí, de otro lugar no puedo ser...
¡Me reconozco en la costumbre de volver!
A reencontrarme en mí, a valorar después,
las cosas que perdí... ¡La vida que se fue!

Llegué y casi estoy, a punto de partir...
Sintiendo que me voy, y no me quiero ir.
Doblé la esquina de mi misma, para comprender,
¡que nadie escapa al fatalismo de su propio ser!
Y estoy pisando las baldosas,
¡floreciéndome las rosas por volver...!

Esta ciudad no se si existe, si es así...
¡O algún poeta la ha inventado para mí!
Es como una mujer, profética y fatal
¡pidiendo el sacrificio hasta el final!
Pero también tiene otra voz, tiene otra piel;
y el gesto abierto de la mesa de café...
El sentimiento en flor, la mano fraternal
y el rostro del amor en cada umbral.

Ya sé que no es casual, haber nacido aquí
y ser un poco asi... triste y sentimental.
Ya sé que no es casual, que un fueye por los dos,
nos cante el funeral para decir... ¡Adiós!
Decirte adiós a vos... ya ves, no puede ser.
Si siempre y siempre sos, ¡una razón para volver!

Siempre se vuelve a Buenos Aires, a buscar
esa manera melancólica de amar...
Lo sabe sólo aquel que tuvo que vivir
enfermo de nostalgia... ¡Casi a punto de morir!...

domingo, 4 de julio de 2010

Argentina vs Alemania - Mundial 2010



Saben lo que pasa es con esos jugadores no podiamos perder solo habia que parar el equipo correcto segun el rival !! no le podemos jugar a Alemania igual que a Corea o a Grecia .
Romero
Garce Otamendi Burdiso Jonas
mascherano Bolatti
Messi Carlitos
Kun
Higuain

Soy mas Maradoniano que muchos pero no le podemos pagar el curso de capacitacion de tecnico con la seleccion, cualquiera se daba cuenta ya en el primer tiempo que el problema de Argentina estaba en los defensa laterales y la contencion en el medio.
He dicho..

sábado, 3 de julio de 2010

Ilusión Azul



Música: A. Arce
Letra: A. Arce
(Vals)

Altiva y soberbia cual diosa pagana,
pasaste a mi lado mostrando el rencor,
y desde aquel día yo se que he perdido
la gloria inefable de un sueño de amor.

No extraño tus besos que fueron fingidos,
ni extraño tus labios de raro dulzor,
ni me sorprende tu enorme falsía
que ha traicionado mi amor.

Yo tan solo siento
de todo tu enojo
el traidor embrujo
que tienen tus ojos.

Ojos que fueron estrellas que guiaron mi alma,
que me roban calma si me niegan crueles
cuando ansioso busco su mirar de amor.
Ojos que las redes donde prisionero
te adoré sincero y me has hecho esclavo
al poner en mi alma la ilusión azul.

Pero tu alma desdeñosa y fría
no sabía de amores para mi dolor.
Fueron tus ojos los que me mintieron
tan engañadores, como aquel fulgor.
Y ahora arrastro la cadena
del recuerdo triste
del pasado hermoso
al vivir dichoso
en los dorados brazos
de aquella ilusión.