viernes, 31 de julio de 2009

Vals de los quince




Letra de Agustín Minotti
Musica de Agustín Minotti

Tenue tul de la ilusión
envuelve tu candor
tu sueño se cumplió:
quince años tienes hoy:
tu blanca ensoñación
me embriaga de emoción.
Eres novia de la flor,
eres alba del amor,
con la palidez lunar
plateaste tu felicidad.

Noche azul...
Las estrellas son joyas del vals
y al danzar
Quince años girando al compás:
juventud, bella juventud,
brinden hoy
sea eterna la juventud.



Poema de Hector Gagliardi
La piba de 15

miércoles, 29 de julio de 2009

Caminito



Música: Juan de Dios Filiberto
Letra: Gabino Coria Peñaloza

Caminito que el tiempo ha borrado,
que juntos un día nos viste pasar,
he venido por última vez,
he venido a contarte mi mal.

Caminito que entonces estabas
bordado de trébol y juncos en flor,
una sombra ya pronto serás,
una sombra lo mismo que yo.

Desde que se fue
triste vivo yo,
caminito amigo,
yo también me voy.

Desde que se fue
nunca más volvió.
Seguiré sus pasos...
Caminito, adiós.

Caminito que todas las tardes
feliz recorría cantando mi amor,
no le digas, si vuelve a pasar,
que mi llanto tu suelo regó.

Caminito cubierto de cardos,
la mano del tiempo tu huella borró...
Yo a tu lado quisiera caer
y que el tiempo nos mate a los dos.

Inspiración





Letra: Luis Rubinstein
Musica: Peregrino Paulos
Año: 1928


Por la senda del dolor
cruzaron en bandada los recuerdos del ayer,
trayendo en pos aquel querer
donde quemé la dulce fe de mi ilusión
hecha canción.
plegaria en flor que ayer bordé
en el calor del cuchitril de bohemia.

Ensueño azul que dejó
el sinsabor de mi anemia...
Se tronchó mi corazón
en la esperanzza vana
que asomara a mi balcón
y que fatal me trajo el mal.

(recitado)
Soplaron vientos de hastío
por los valles de mi vida
y trajeron la ceniza de mi lírica ilusión,
hecha carne en las tinieblas
de mi juventud perdida
donde murió mi bohemia
con mi última canción.

Hoy la escarcha de los años
me ha blanqueado los cabellos
y estoy solo en la tragedia
de mi triste soledad,
pero aún siento la nostalgia
de sus negros ojos bellos,
a pesar que no tuvieron para mí
más que crueldad.

Juventud
que ya se fue,
tras el vano sueño azul
de ayer,
deshojada y mustia flor
de amor,
ilusión que mató
el dolor.

sábado, 25 de julio de 2009

川の流れのように . (Como el fluir de un rio)



COMO EL FLUIR DE UN RÍO

Sin darme cuenta,
vine andando por este camino largo y estrecho.
Al volver la vista atrás
se vislumbra mi tierra natal en la lejanía
Es un camino escarpado, un camino sinuoso,
igual es la vida,
para la cual no contamos con siquiera un mapa.
Aah, las eras pasan suavemente como el fluir de un río.
Aah, simplemente el cielo se tiñe de carmesí
incesantemente como el fluir de un río.
El vivir es un viaje que realizo mientras
ando en busca de sueños en este camino sin final
llevando conmigo a mi amada
aunque es un camino lleno de fango por la lluvia,
ya que sé que algún día vendrá de nuevo un día soleado.
Aah, quiero entregarme serenamente como el fluir del río.
Aah, mientras cambian las estaciones
en espera de que la nieve se derrita como el fluir de un río.
Aah, quiero entregarme serenamente como el fluir del río,
por siempre, escuchando su azul murmullo.

Caminito Soleado



Música: Carlos Gardel
Letra: Alfredo Le Pera
(canción)
Claro caminito criollo
florido y soleado,
con pañuelo bordeado
vos me viste pasar.
Mientras los pastos amigos
que saben mi anhelo,
como dulce consuelo,
su verde saludo
me hacían llegar.

Cruzando montes y valles,
con alas venía
mi pobre carreta,
con su carga de esperanzas
las ruedas le hacían
al viento gambetas.
Y cuando ya atravesaba
la hondura del valle
de lenta corriente,
una congoja naciente
detuvo su impulso
parando su andar,
porque en ese arroyito
a veces tus ojos
se saben mirar.

Y así que vi su casita
de puro celoso
me sobró el pampero
para contarle chismoso
que traigo en mi apero
mil prendas de amor.
Para su pelo una cinta
que llevo escondida
de lindo color.
Para sus labios mi antojo
y para sus ojos
un claro cristal,
y pa' su blanca garganta
el criollo que canta
tiene este cantar.

Claro caminito criollo
florido y soleado,
yo quiero que se asombre
cuando ella me nombre
al verme llegar.

Barrio pobre



Música: Vicente Belvedere
Letra: Francisco García Jiménez

En este barrio que es reliquia del pasado,
por esta calle, tan humilde tuve ayer,
detrás de aquella ventanita que han cerrado,
la clavelina perfumada de un querer...
Aquellas fiestas que en tus patios celebraban
algún suceso venturoso del lugar,
con mi guitarra entre la rueda me contaban
y en versos tiernos entonaba mi cantar...

Barrio... de mis sueños más ardientes,
pobre...cual las ropas de tus gentes.
Para mí guardabas toda la riqueza
y lloviznaba la tristeza
cuando te di mi último adiós...
¡Barrio... barrio pobre, estoy contigo!...
¡Vuelvo a cantarte, viejo amigo!
Perdoná los desencantos de mi canto,
pues desde entonces, lloré tanto,
que se ha quebrado ya mi voz...

Por esta calle iba en pálidas auroras
con paso firme a la jornada de labor;
cordial y simple era la ronda de mis horas;
amor de madre, amor de novia...¡siempre amor!
Por esta calle en una noche huraña y fría
salí del mundo bueno y puro del ayer,
doblé la esquina sin pensar lo que perdía,
me fui sin rumbo, para nunca más volver....



El choclo



Música: Ángel Villoldo
Letra: Enrique Santos Discépolo
Con este tango que es burlón y compadrito
se ató dos alas la ambición de mi suburbio;
con este tango nació el tango, y como un grito
salió del sórdido barrial buscando el cielo;
conjuro extraño de un amor hecho cadencia
que abrió caminos sin más ley que la esperanza,
mezcla de rabia, de dolor, de fe, de ausencia
llorando en la inocencia de un ritmo juguetón.

Por tu milagro de notas agoreras
nacieron, sin pensarlo, las paicas y las grelas,
luna de charcos, canyengue en las caderas
y un ansia fiera en la manera de querer...

Al evocarte, tango querido,
siento que tiemblan las baldosas de un bailongo
y oigo el rezongo de mi pasado...
Hoy, que no tengo más a mi madre,
siento que llega en punta 'e pie para besarme
cuando tu canto nace al son de un bandoneón.

Carancanfunfa se hizo al mar con tu bandera
y en un pernó mezcló a París con Puente Alsina.
Triste compadre del gavión y de la mina
y hasta comadre del bacán y la pebeta.
Por vos shusheta, cana, reo y mishiadura
se hicieron voces al nacer con tu destino...
¡Misa de faldas, querosén, tajo y cuchillo,
que ardió en los conventillos y ardió en mi corazón.

martes, 21 de julio de 2009

Malevaje



Música: Juan de Dios Filiberto
Letra: Enrique Santos Discépolo
Decí, por Dios, ¿qué me has dao,
que estoy tan cambiao,
no sé más quien soy?
El malevaje extrañao,
me mira sin comprender...
Me ve perdiendo el cartel
de guapo que ayer
brillaba en la acción...
¿No ves que estoy embretao,
vencido y maniao
en tu corazón?

Te vi pasar tangueando altanera
con un compás tan hondo y sensual
que no fue más que verte y perder
la fe, el coraje,
el ansia 'e guapear.
No me has dejao ni el pucho en la oreja
de aquel pasao malevo y feroz...
¡Ya no me falta pa' completar
más que ir a misa e hincarme a rezar!

Ayer, de miedo a matar,
en vez de pelear
me puse a correr...
Me vi a la sombra o finao;
pensé en no verte y temblé...
¡Si yo, -que nunca aflojé-
de noche angustiao
me encierro a yorar!...
Decí, por Dios, ¿qué me has dao,
que estoy tan cambiao,
no sé más quien soy?

sábado, 18 de julio de 2009

Porque la quise tanto



Música: Mariano Mores
Letra: Rodolfo Taboada

Remotos acordeones
despliegan en la noche
sus pájaros de brumas
y un coro de fantasmas
que gritan en las sombras
preguntan y preguntan,
preguntan por qué lloro,
preguntan por qué canto,
por qué no la maldigo,
por qué la quise tanto... tanto...

Yo sólo sé que fue el remanso de mi vida gris,
que en el calvario de mis días fue una tibia luz,
que bendigo esta negra cruz,
que está aquí... y está ausente...
y sangra en mis labios desesperadamente.

Las sombras implacables
jugando con mi angustia
me acosan y preguntan,
preguntan por qué en vano
la espero todavía;
por qué vivo soñando
que alguna vez fue mía... mía...

Quema esas cartas



Quemá esas cartas donde yo he grabado
Solo y enfermo, mi desgracia atroz,
Que nadie sepa que te quise tanto,
Que nadie sepa, solamente Dios.

Quemalas pronto y que el mundo ignore
La inmensa pena que sufriendo está,
Un hombre joven, que mató el engaño
Un hombre bueno, que muriendo va.

Te amaba tanto que a mi santa madre
Casi la olvido por pensar en ti,
Y mira ingrata como terminaron
Todos los sueños que vivían en mí.

Yo ya no espero que tu amor retorne
Al dulce nido donde ayer nació,
Yo ya no creo que tu blanca mano
Cierre la llaga que en mi pecho abrió.

Y te perdono porque aquel que quiso
Nunca maldice lo que ayer besó,
Gime y se arrastra sin tomar venganza
Muere, en silencio, como muero yo.

Mas cuando en brazos de otro ser dichoso
Caigas rendida de placer y amor,
Recuerda al menos que has dejado trunca
Una existencia que mató el dolor.

Letra : Juan Pedro López
Música : Alberto Cosentino




jueves, 16 de julio de 2009

Taquito militar



Música: Mariano Mores
Letra: Dante Gilardoni / Raúl Capablanca
(milonga)
Para bailar esta milonga,
hay que tener primeramente
una buena compañera
que sienta en el alma
el ritmo de fuego así...

Hay que juntar las cabezas mirando hacia el suelo
pendientes de su compás,
dejar libres los zapatos que vayan y vengan
en repiqueteo sin fin,
y que mueva la mujer las caderas
al ritmo caliente que da el tambor,
olvidarse de la vida y del amor
para bailar...

Porque en este baile insinuante
hay que tener,
desde el corazón palpitante
hasta los pies,
el repiquetear del taquito
se hace obsesión,
hasta que se funde en el ritmo
del corazón...

Al compás de esta milonga
vuelvo a ver igual que ayer
un baile de meta y ponga
y un vivir para querer...
Un pasito atrás por aquí,
otro avance más por allá,
la sentada limpia y después
viene el taconeo final...
El candombe está en lo mejor
y la moza vibra al compás,
y siempre que esta milonga
vuelvo a bailar, me gusta más...

Para bailar,
se necesita más que nada amar la vida,
porque es vida todo aquello
que se agita en los compases
de un candombe de mi flor y
de mi amor

domingo, 12 de julio de 2009

La copa del olvido



Música: Enrique Delfino
Letra: Alberto Vaccarezza
¡Mozo! Traiga otra copa
y sírvase de algo el que quiera tomar,
que ando muy solo y estoy muy triste
desde que supe la cruel verdad.
¡Mozo! Traiga otra copa
que anoche, juntos, los vi a los dos...
Quise vengarme, matarla quise,
pero un impulso me serenó.

Salí a la calle desconcertado,
sin saber cómo hasta aquí llegué
a preguntar a los hombres sabios,
a preguntarles qué debo hacer...
Olvide, amigo—dirán algunos—,
pero olvidarla no puede ser...
Y si la mato, vivir sin ella,
vivir sin ella nunca podré.

¡Mozo! Traiga otra copa
y sírvase de algo el que quiera tomar...
Quiero alegrarme con este vino
a ver si el vino me hace oluidar.
¡Mozo! Traiga otra copa
y sírvase de algo el que quiera tomar.

sábado, 11 de julio de 2009

En esta tarde gris



Música: Mariano Mores
Letra: José María Contursi
¡Qué ganas de llorar en esta tarde gris!
En su repiquetear la lluvia habla de ti...
Remordimiento de saber
que por mi culpa, nunca,
vida, nunca te veré.
Mis ojos al cerrar te ven igual que ayer,
temblando, al implorar de nuevo mi querer...
¡Y hoy es tu voz que vuelve a mí
en esta tarde gris!

Ven
—triste me decías–,
que en esta soledad
no puede más el alma mía...
Ven
y apiádate de mi dolor,
que estoy cansada de llorarte,
sufrir y esperarte
y hablar siempre a solas
con mi corazón.
Ven,
pues te quiero tanto,
que si no vienes hoy
voy a quedar ahogada en llanto...
No,
no puede ser que viva así,
con este amor clavado en mí
como una maldición.

No supe comprender tu desesperación
y alegre me alejé en alas de otro amor...
¡Qué solo y triste me encontré
cuando me vi tan lejos
y mi engaño comprobé!
Mis ojos al cerrar te ven igual que ayer,
temblando, al implorar de nuevo mi querer...
¡Y hoy es tu voz que sangra en mí,
en esta tarde gris!


Martirio



Música: Enrique Santos Discépolo
Letra: Enrique Santos Discépolo
Solo...
¡increíblemente solo!
vivo el drama de esperarte,
hoy...
mañana...
siempre igual...
¡Dolor que muerde las carnes,
herida que hace gritar,
vergüenza de no olvidarte,
si yo sé que no vendrás!
¡Solo!
¡Pavorosamente solo!...
como están los que se mueren,
los que sufren,
los que quieren,
así estoy... ¡por tu impiedad!

Sin comprender,
por qué razón te quiero...
Ni qué castigo de Dios
me condenó al horror
de que seas vos, vos,
solamente sólo vos...
Nadie en la vida más que vos
lo que deseo...
Y entre la risa y las burlas
yo arrastré mi amor
¡llamándote!...

Fiebre
de pasiones maldecidas,
que uno trae desde otras vidas
y las sufre hasta morir...
Dolor de bestia perdida,
que quiere huir del puñal,
yo me revuelco sin manos
pa' librarme de tu mal...
¡Solo!...
¡Despiadadamente solo!...
mientras grita mi conciencia
tu traición
¡la de tu ausencia!
hoy... mañana...
siempre igual...

Añoranzas



Musica y letra : Jose Maria Aguilar

El cierzo helado mató las flores
que florecieron en mi rosal,
y de los tientos de mis amores,
solo y desierto está el barandal.
Está en el patio la misma fuente
que mis canciones logró escuchar,
pero a su vera, con voz doliente,
el cruel invierno viene a cantar.

Las golondrinas que ayer tejieron
su amante nido, lleno de amor,
se consultaron y ya se fueron
hacia otros climas de más calor.
Los copos blancos van sepultando
todo lo hermoso, todo el amor,
y ya en las almas está cantando
la musa triste, la del dolor.

Pero el invierno, con su tristeza,
pronto el reinado terminará,
vendrán de nuevo esas bellezas
y el mundo entero feliz se reirá.
El alma mía, flor delicada,
no ha sucumbido ante el dolor,
porque se sabe de ti adorada,
porque la cuida siempre tu amor.

Sexteto Mayor

lunes, 6 de julio de 2009

Una canción



Música: Aníbal Troilo
Letra: Cátulo Castillo

La copa de alcohol hasta el final
y en el final tu niebla, bodegón...
Monótono y fatal
me envuelve el acordeón
con un vapor de tango que me hace mal...
¡A ver, mujer! Repite tu canción
con esa voz gangosa de metal,
que tiene olor a ron
tu bata de percal
y tiene gusto a miel
tu corazón...

Una canción
que me mate la tristeza,
que me duerma, que me aturda
y en el frío de esta mesa
vos y yo: los dos en curda...
Los dos en curda
y en la pena sensiblera
que me da la borrachera
yo te pido, cariñito,
que me cantes como antes,
despacito, despacito,
tu canción una vez más...

La dura desventura de los dos
nos lleva al mismo rumbo, siempre igual,
y es loco vendaval
el viento de tu voz
que silba la tortura del final...
¡A ver, mujer! Un poco más de ron
y ciérrate la bata de percal
que vi tu corazón
desnudo en el cristal,
temblando al escuchar
esa canción...

domingo, 5 de julio de 2009

Yo soy María



Yo soy María
de Buenos Aires
de Buenos Aires María, no ven quién soy yo?
María Tango, María del arrabal,
María noche, María pasión fatal,
María del amor de
Buenos Aires soy
yo!

Yo soy María
de Buenos Aires
si en este barrio la gente pregunta quién soy,
pronto muy bien lo sabrán
las hembras que
me envidiarán,
y cada macho a mis pies
como un ratón
en mi trampa ha de caer.

Yo soy María
de Buenos Aires
soy la más bruja cantando y amando también!
Si el bandoneón me provoca... tiará, tatá!
le muerdo fuerte la boca... tiará, tatá!
con diez espasmos en flor que yo tengo en mi ser.

Siempre me digo
dale María!
cuando un misterio me viene trepando la voz,
y canto un tango que jamás nadie cantó
y sueño un sueño que nadie jamás soñó:
porque el mañana es hoy
con el ayer después, che!

(Tarareo y orquesta)

Yo soy María
de Buenos Aires
de Buenos Aires María, yo soy mi ciudad!
María Tango, María del arrabal,
María noche, María pasión fatal,
María del amor de
Buenos Aires soy yo!

El bazar de los juguetes



El bazar de los juguetes
Música: Roberto Rufino
Letra: Reinaldo Yiso

Patrón cierre la puerta, no me mire asombrado,
le compro los juguetes que tiene en el bazar.
Yo se los compro todos, no importa lo que gasto,
dinero no me falta para poder pagar.
Por una sola noche yo quiero ser rey mago,
para que los purretes de todo el arrabal
mañana al despertarse aprieten en sus manos
el sol de esta alegría que yo les quiero dar.

Al bazar de los juguetes,
cuantas veces de purrete,
me acercaba para ver.
Para ver de allí, de afuera,
desde atrás de esa vidriera
lo que nunca iba a tener.
Si mi vieja era tan pobre
le faltaba siempre un cobre
para comprarnos el pan.
Y hoy que puedo,
que la suerte me sonríe,
yo no quiero que haya un pibe
que no tenga
ni un juguete pa' jugar.

Yo sé lo que es sentirse en una nochebuena,
teniendo por regalo un solo cacho 'e pan,
sabiendo que los otros, cruzando la vereda,
dejaban sus juguetes allí, en medio del zaguán.
Yo sé lo que es sentirse besado tiernamente
por una pobre madre que no me pudo dar
ni el más humilde y pobre de todos los juguetes
por eso se los compro por eso nada más.